El metaverso es uno de los temas más discutidos hoy en día. Algunos creen que va a significar una revolución a nivel mundial, mientras que otros piensan que no es más que una moda. Pero, ¿Qué dicen los “haters” del metaverso?

Entre las muchas personas que han criticado el metaverso, podemos encontrar dos de ellas que han destacado por su pasado en grandes empresas tecnológicas. Estamos hablando del expresidente ejecutivo de Evernote y de uno de los creadores del mismísimo iPod.

A continuación descubriremos por qué estos dos magnates de la tecnología han decidido cargar contra el metaverso y en qué se basan para argumentar que el futuro del internet no está en buenas manos.

La Crítica del Creador del iPod

Como mencionamos anteriormente, algunos líderes tecnológicos han expresado sus dudas sobre el metaverso. Y ahora Tony Fadell, una de las mentes brillantes detrás del iPod, se ha unido a ellos.

Su primera crítica al metaverso la hizo en la revista Wired, cuando dijo explícitamente “Que le den al metaverso” por su falta de conexión personal y humana. Una de las cosas más importantes que mencionó en la entrevista fue la siguiente:

“En el mundo virtual no puedo mirarte a los ojos, no puedo ver tu cara para crear confianza y una conexión personal real. En el mundo virtual no hay baile cuando la gente ni siquiera tiene cuerpo. Cuando estoy realmente con alguien, se me erizan los pelos de la nuca, porque mi cuerpo tiene un sensor para ello”.

Fadell también dijo que se opone al metaverso porque está quitando talento y recursos a la lucha contra el cambio climático. Aseguró que el calentamiento global está peor que nunca, y todos los genios tecnológicos y todo el dinero disponible está siendo usado para resolver un problema que realmente no tenemos.

Pero el creador del iPod no es el único ejecutivo tecnológico que tiene algo que decir en contra del metaverso. El que fue director ejecutivo de la famosa aplicación “Evernote” también le ha dedicado unas palabras a la realidad virtual.

La Crítica del Ejecutivo de Evernote

La historia del Phil Libin con el metaverso empezó cuando se probó sus primeras gafas de realidad virtual. Antes de ponérselas hizo público sus pensamientos sobre lo que creía que se iba a encontrar:

“Tenía la fuerte sensación de que iba a ser una basura, pero fui con la mayor esperanza posible de que me sorprendiera gratamente”, dijo Libin.

Él y sus empleados de su nueva empresa de videoconferencias “Mmhmm”, de la cual es director general, empezaron a probar el producto Horizon Workrooms de Meta . Esta aplicación desarrollada por el antiguo Facebook permite utilizar gafas de realidad virtual para hacer reuniones de trabajo en el metaverso. Libin dijo que la experiencia fue una decepción total, y que solo fue tolerable durante algunos minutos.

Ha afirmado que el uso de la realidad virtual para reuniones de trabajo es mucho peor que las videoconferencias normales como Zoom, en las que la gente puede seguir haciendo cosas del mundo real como beber un poco de café (sin estar impedido por el equipo de realidad virtual puesto en la cara).

Los defensores del metaverso creen que tendremos que esperar a ver todo su potencial para opinar, pero Libin no cree que el metaverso vaya a ir a mejor, simplemente opina que se va a hacer más sofisticado.

Conclusión

Como hemos podido comprobar, existen varias razones por las que el metaverso es odiado por tanta gente. El mayor número de quejas viene a través de la idea de que el metaverso es una forma de “escapar de la realidad” que mucha gente considera poco saludable.

En otras palabras, es como coger los problemas de salud mental que las redes sociales están provocando en mucha gente y aumentarlos de manera desproporcionada a través de la realidad virtual.

Puede que todos estos comentarios negativos se hayan hecho en el contexto de una nueva tecnología, porque la gente todavía no se ha acostumbrado a ella y la desconoce. Ya pasó exactamente lo mismo cuando se introdujo el internet por primera vez, y podría ser que estemos viviendo esa misma historia de nuevo con el metaverso.