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Parece que la música va a tener un papel importante en el Metaverso, como parte de las experiencias que este mundo virtual nos ofrece.
De hecho, ya se han llevado a cabo algunos conciertos en vivo en universos virtuales, con un gran éxito de asistencia.
La pandemia ha impulsado este tipo de eventos por la imposibilidad de realizarlos de manera física, pero el Metaverso va más allá de un concierto retransmitido vía streaming.
Se trata de una experiencia completa, tridimensional y social que cambiará la manera en que entendemos conciertos y festivales.
Los primeros conciertos en vivo en el Metaverso
Epic Games es una de las compañías que más interés ha mostrado por el Metaverso, y ya está poniendo un gran peso sobre los conciertos en vivo a través de su videojuego Fortnite.
En esta plataforma ya se han realizado distintos conciertos con un gran éxito, como los de Steve Aoki, Travis Scott (reuniendo a más de 12 millones de jugadores) o Dillon Francis.
Pero sin duda, su concierto del DJ Marshmello fue el primer gran éxito, que abrió las puertas y dio el pistoletazo de salida a los conciertos virtuales, con más de 10 millones de asistentes y batiendo todos los récords de asistencia de cualquier concierto en el mundo real.
Pero Epic Games no es la única compañía que apuesta por los conciertos virtuales.
The Sandbox, otro de los Metaversos más importantes, ya está cerrando acuerdos con Warner Music para llevar la música a su universo, fichando a artistas tan importantes como Ed Sheeran o Bruno Mars.
A través de esta colaboración, Warner Music abre todo un nuevo espacio a la música, en el que los usuarios podrán interactuar con sus cantantes favoritos en un nuevo contexto.
Nuevas oportunidades de los conciertos en vivo en el Metaverso
Los conciertos en vivo pueden ser todo un reclamo hacia diferentes Metaversos y videojuegos, y una experiencia muy novedosa.
Sin embargo, más allá de la experimentación, no podemos olvidar de que también estamos ante un negocio y la música, en ocasiones, resulta difícil de rentabilizar.
Parece que el Metaverso puede ayudar mucho en este sentido, gracias a distintas oportunidades:
- En primer lugar, los costes que supone el alquiler de un espacio y todo lo necesario dentro de él se reducen lógicamente en el mundo virtual. Aun así, no podemos pensar en un coste cero pues el diseño de espacios, iluminación, etc., también conlleva un trabajo. Pero sin duda, una vez creado un espacio o una experiencia, los costes de realizar distintos espectáculos pueden reducirse notablemente.
- Por otro lado, los conciertos en vivo pueden ofrecer experiencias inmersivas pero también experiencias post-concierto. ¿Imaginas acudir a una fiesta después del concierto de tu cantante favorito, llena de fans y con la posibilidad de que él se pase por allí? Este tipo de experiencias serían posibles en el Metaverso, y durante la fiesta podríamos encontrar oportunidades de comprar Merchandise u otras experiencias relacionadas con nuestro cantante y personalizadas para nosotros. Podríamos comprar objetos físicos, como una camiseta que nos llegue de manera real a nuestra casa, u objetos virtuales, como esa misma camiseta para nuestro avatar. Esto completa la experiencia del usuario, al mismo tiempo que aumenta los ingresos para el negocio.
- Por último, el público al que podemos llegar con un concierto virtual es mucho más amplio. Al no tener una ubicación física, personas de todo el mundo podrían acudir a un mismo concierto, con lo que resultaría más sencillo llenar grandes salas y ofrecer conciertos multitudinarios que, con el mismo coste, generarían muchos más beneficios.
¿Y si Metaverso y realidad se uniesen para ofrecer conciertos híbridos?
Ahora que vemos el Metaverso cada vez más cerca, podemos soñar con ir un paso más allá. Quizás los espacios físicos puedan estar adaptados (a través de cámaras, receptores de sonido, etc.), de manera que pueda conseguirse una réplica virtual perfecta.
Es decir, que un concierto presencial con miles de personas de manera física pueda también retransmitirse en digital.
Pero no solo como un video en streaming, sino de manera que los avatares del público virtual puedan ocupar su sitio en la sala de conciertos y vivir la experiencia como si realmente estuviesen allí.
Así, el concierto sería el mismo que se está produciendo en la realidad, pero los asistentes serían diferentes (podríamos relacionarnos con otros avatares, bailar al ritmo de la música, etc.).
Y ya no solo eso, sino que en un mismo espacio, podrían relacionarse personas físicas y avatares. ¿Imaginas acudir a un concierto en tu ciudad y que el asiento de tu lado esté reservado para el avatar de tu amiga que vive al otro lado del mundo?
Tal vez sea algo complejo, pero todavía no sabemos hasta dónde puede llegar la tecnología.
Al fin y al cabo, avances que hoy son reales parecían descabellados hace algunos años, así que no podemos descartar ninguna opción.
Como vemos, el Metaverso puede ser un gran motor de cambio para el entorno musical y, más en concreto, para la música en directo.
Ya no habrá una sola forma de disfrutar de los conciertos, sino que la realidad y el mundo digital trabajarán juntas para crear nuevas y mejores experiencias para los fans.